Beneficios de la Formación Dual
El modelo Dual combina el aprendizaje en una empresa con la formación académica.
La empresas establecen una relación laboral con el alumno-aprendiz, que en general no dispone de experiencia laboral ni titulación necesaria para el desempeño de esa profesión.
El periodo de tiempo dedicado al ámbito laboral es de un 70-80% de la jornada y sueldo, mientras que el resto del tiempo lo debe dedicar a la formación en aula. Para el buen desempeño de la formación se designa un tutor o mentor en la empresa que guía al alumno en la adquisición de las competencias necesarias para el desempeño del puesto en cuestión.
Las acciones de Formación dual permiten configurar un itinerario profesional de los participantes cuyo objetivo es la adquisición práctica de las competencias clave para una profesión y puesto de trabajo.
La empresa está obligada a formalizar con el alumno un contrato de trabajo de formación y aprendizaje, ofrecer un puesto de trabajo relacionado con la actividad formativa y asignar una persona de la empresa (tutor de empresa) como responsable de la supervisión del trabajo y su evolución.
Una gran ventaja para la empresa es adecuar los niveles de formación y perfil profesional a necesidades reales exigidas por el mercado de trabajo, nada de formación anticuada, y sí utilización de las tecnologías actuales existentes en el mercado. Por otro lado, se dan resultados objetivos y medibles, y un diseño de un perfil de acceso al mercado laboral (formación + inserción).
Algunos problemas consiste en la difícil aplicación a las pymes, posible utilización de mano de obra barata y la financiación, ya que actualmente las empresas ya contribuyen a mantener un sistema de formación con los impuestos que pagan. No es correcto pagar por dos vías (seguros sociales y pago de la nómina del aprendiz).