Para justificar los costes de un profesor o tutor en un curso bonificado, es fundamental seguir una serie de pasos y criterios establecidos por Fundae y respaldados por la normativa vigente. Aquí te explico cómo se lleva a cabo esta justificación económica:
Documentación Necesaria
La justificación de los costes de un formador en un curso bonificado debe estar respaldada por una documentación adecuada y completa que incluya:
Contrato de Trabajo o Acuerdo de Colaboración: Si el formador es un empleado de la empresa, debe presentarse su contrato de trabajo que especifique su rol como formador dentro del curso. Si es un colaborador externo o autónomo, se debe aportar el contrato de prestación de servicios que detalle las funciones específicas y el periodo de contratación relacionado con el curso.
Facturas y Recibos: Se deben proporcionar facturas o recibos emitidos por el formador o, en su caso, por la entidad que lo subcontrata. Estos documentos deben detallar claramente los servicios prestados, las fechas y el número total de horas impartidas.
Nóminas: En el caso de formadores internos, deben incluirse las nóminas que correspondan al periodo durante el cual se impartió el curso, indicando las retribuciones específicas atribuibles a las actividades de formación.
Certificados de Profesionalidad o Títulos: Para corroborar la cualificación del formador para impartir el curso, deben presentarse copias de sus certificados de profesionalidad o títulos académicos relevantes.
Proceso de Justificación
Determinación del Coste por Hora: Primero, se debe establecer el coste por hora del formador. Esto implica dividir el coste total acordado por el número de horas de formación impartidas. Este cálculo debe estar en concordancia con los módulos económicos establecidos por Fundae para la modalidad de formación aplicable (presencial, online o mixta).
Registro Horario: Se debe mantener un registro detallado de las horas trabajadas por el formador específicamente en las actividades de formación. Esto puede incluir la preparación, la impartición y el seguimiento del curso.
Justificación de la Necesidad y Adecuación: Debe justificarse que las horas de formación impartidas y el coste asociado son necesarios y adecuados para los objetivos del curso. La justificación debe alinearse con los contenidos y metas del programa de formación.
Cofinanciación y Bonificaciones: En la documentación final, se debe mostrar cómo los costes del formador se integran en el total del curso y cómo se aplican las bonificaciones y la cofinanciación privada, asegurando que no se superen los límites establecidos por la normativa.
Consideraciones Adicionales
Transparencia y Cumplimiento: Toda la documentación debe ser clara, detallada y estar disponible para revisión en caso de auditorías por parte de Fundae o de otros organismos competentes.
Integridad en el Reporte: Es crucial que los informes financieros y la documentación reflejen fielmente todas las transacciones y costes relacionados con la formación bonificada para evitar desviaciones o sanciones.
A través de este proceso, las empresas pueden asegurarse de que los costes de los formadores en cursos bonificados están bien justificados y en conformidad con las exigencias legales y operativas, maximizando así la efectividad y el impacto de sus programas de formación.
Cuando se trabaja con un formador externo y autónomo en el contexto de un curso de formación bonificada, es fundamental que el formador emita facturas que cumplan con todos los requisitos fiscales y contractuales para garantizar una correcta justificación de los costes ante Fundae. Detallar Información Fiscal Completa como:
-Nombre y Apellidos o Razón Social: El nombre completo del formador tal como aparece en su registro fiscal o, si opera bajo una razón social, esta debe estar claramente indicada.
-Número de Identificación Fiscal (NIF): El CIF o NIF del formador debe estar presente para verificar su registro legal como autónomo o empresa.
-Domicilio Fiscal: La dirección fiscal del formador, que debe coincidir con la registrada en la Agencia Tributaria.
-Descripción Detallada del Servicio Proporcionado: Descripción del curso impartido, incluyendo el título o tema específico de la formación.
-Fechas de Impartición: Las fechas exactas en las que se impartió el curso deben estar claramente indicadas en la factura. Estas fechas deben ser coherentes con las estipuladas en el contrato de prestación de servicios para evitar discrepancias en la justificación de la formación.
-Total a Pagar: Cada factura debe incluir un desglose detallado del coste total, especificando el número de horas impartidas y el costo por hora, junto con cualquier otro gasto adicional acordado.
-Impuestos Aplicables: Si corresponde, deben incluirse detalles de cualquier impuesto, especificando claramente la base imponible y el porcentaje aplicado.
Condiciones de Pago:
-Plazos y Forma de Pago: Las condiciones y plazos para el pago deben reflejar lo acordado en el contrato, y cualquier penalización o interés por demora en el pago también debe estar documentado.